Maduración in vitro de ovocitos: una opción de reproducción asistida para casos seleccionados
La técnica permite la obtención de embriones evolutivos a partir de la recuperación de ovocitos inmaduros, un hecho de especial relevancia en aquellos casos en que está desaconsejada la estimulación ovárica o que cuentan con tiempo limitado para iniciar un tratamiento para la preservación de la fertilidad.
Doctora Beatriz Bueno
Ovogénesis es el término que define al muy largo y complejo proceso de formación de los ovocitos que tiene lugar en los ovarios. Este proceso se inicia durante la formación del embrión femenino y cumple varias de sus etapas durante la vida prenatal, hasta que, en algún momento, se detiene en una suerte de estado de hibernación que dura hasta la pubertad, momento en el cual los ovocitos reanudan su actividad y, cíclicamente, alguno de ellos logra avanzar de su transición de estado diploide (tienen dos conjuntos completos de cromosomas) al estado haploide (portan un único juego de cromosomas) y madurar hasta ser receptivo a la fecundación.
En este proceso de maduración natural que ocurre en cada ciclo menstrual, el ovocito seleccionado alcanza el estadio llamado de metafase II (maduro), que es cuando el óvulo puede ser fecundado por un espermatozoide y dar lugar a un embrión capaz de generar un embarazo.
En las técnicas de reproducción asistida, como la fecundación in vitro, el médico realiza una estimulación ovárica controlada con el objetivo obtener varios ovocitos metafase II a la vez. Mediante controles ecográficos, el médico hace un seguimiento de los ovarios hasta determinar que los folículos (pequeños sacos que albergan al óvulo) alcanzan un diámetro de entre 16 y 18 mm, lo que le indica que el óvulo que contiene ha debido completar su proceso de maduración y es apto para la fecundación. En ese momento se programa la aspiración de los folículos mediante una punción folicular o punción ovárica guiada por ultrasonido. Solo los ovocitos maduros pueden ser fecundados por un espermatozoide.
Maduración in vitro de ovocitos
La maduración in vitro de ovocitos es una técnica de reproducción asistida que permite madurar óvulos fuera del ambiente ovárico, en condiciones de cultivo en el laboratorio (in vitro) y generar embriones a partir de ellos. "La maduración in vitro de ovocitos consiste en madurar el ovocito extraído del complejo cúmulo-ovocitario in vivo de pequeños folículos antrales, el ovocito se extrae en estadio de vesícula germinal e in vitro se madura hasta metafase II", explica la doctora Beatriz Bueno Olalla, Ginecóloga especialista en Reproducción asistida y miembro de la Unidad de Reproducción Asistida del Hospital Ruber Internacional.
Los folículos antrales son folículos ováricos pequeños (2-10 mm de diámetro) que han formado una cavidad en su interior (antro) que acumula líquido folicular, estos folículos contienen óvulos inmaduros en estadio de vesícula germinal, "una vesícula germinal es un estadio muy precoz del ovocito que tiene que madurar en el laboratorio hasta metafase I, y de metafase I a metafase II, que es el estadio que necesitamos para poder microinyectar el ovocito".
Los ovocitos en estadio de vesícula germinal no pueden ser utilizados directamente para fecundación in vitro, pues aún tienen una carga cromosómica diploide y su citoplasma no es competente para sostener los procesos de fecundación y de división celular necesarios para el desarrollo de un embrión viable.
Recientemente la doctora Bueno participó en la 1ª Jornada Ginecólogxs X Embriólogxs de Madrid, en la que ofreció una conferencia sobre la maduración in vitro de los ovocitos en relación con los protocolos de estimulación ovárica y el perfil de pacientes que se pueden beneficiar de este abordaje.
En 2021, un Comité de expertos integrado por miembros de los Comités de Práctica de la Sociedad Estadounidense de Medicina Reproductiva, la Sociedad de Medicina Reproductiva, Biólogos y Tecnólogos, y la Sociedad de Tecnología de Reproducción Asistida, emitió un informe conjunto en el que se revisan los resultados de las investigaciones sobre la maduración in vitro de los ovocitos y que sugieren su potencial para una aplicación clínica más amplia.
Una técnica indicada para un perfil específico de pacientes
Una diferencia fundamental con los ciclos de Fecundación in vitro clásicos, es que en los casos de Maduración in vitro de ovocitos la paciente no recibe, o recibe muy poco, tratamiento hormonal del utilizado en la estimulación ovárica controlada, lo que supone una ventaja en aquellos casos con riesgo aumentado de Síndrome de Hiperestimulación ovárica.
"Entre las pacientes que se podrían beneficiar de la maduración in vitro de ovocitos se encuentran las pacientes con una alta reserva ovárica que hayan tenido un síndrome de hiperestimulación ovárica, pacientes con factores de riesgo, pacientes hipertensas, pacientes obesas, pacientes fumadoras, pacientes que no pueden tener hiperestronismo y aquellas pacientes que hay que manejar con terapia antitrombótica, esta puede ser una alternativa a estimularla con hormonas", comenta la especialista.
Otro grupo de pacientes en las que pudiera ser de utilidad este procedimiento son las pacientes con cánceres sensibles al estrógeno, o mujeres con tiempo limitado para iniciar un tratamiento para la preservación de la fertilidad antes de someterse a tratamientos oncológicos potencialmente dañinos para los ovarios. "La técnica estándar y validada para la preservación de la fertilidad en este grupo de pacientes oncológicas es la vitrificación de ovocitos maduros, la maduración in vitro de ovocitos pudiera ser una alternativa que pudiera complementar esta opción de criopreservación, de manera similar a lo que ocurre en los casos de criopreservación de corteza ovárica que se realizan en los casos de pacientes pre púberes con diagnóstico de cáncer", nos explica.
Camino a la optimización de la técnica
Son varios los desafíos que tiene por delante la técnica de maduración in vitro de ovocitos antes de su incorporación a la rutina clínica de los centros de reproducción asistida, entre estos retos se encuentran lograr mejorar la tasa de recuperación de ovocitos y la tasa de maduración de los ovocitos. Para ello parece necesario lograr una mejor definición de los criterios para identificar el momento ideal para la recuperación de ovocitos, mejorar la técnica de aspiración (presión de succión, tipo de aguja) y, sobre todo, optimizar la formulación de los medios de cultivo empleados en los protocolos de maduración in vitro.
"Nos falta un medio de cultivo que sea capaz de detener la maduración del núcleo del ovocito en estadio de vesícula germinal durante algunas horas y poder reanudar la meiosis en el laboratorio, de tal forma que podamos tener una tasa de maduración in vitro cercana al 70%, y que ello se traslade a una tasa de blastocisto similar a la que obtenemos en los ovocitos madurados in vivo", advierte la doctora Bueno.
Bloquear temporalmente la maduración del núcleo del ovocito es una estrategia que persigue mejorar la sincronización entre la madurez nuclear y la madurez del citoplasma. Para una correcta fecundación y desarrollo del embrión, el ovocito debe haber crecido completamente y debe haber completado la maduración nuclear y citoplasmática de una manera coordinada. Alteraciones o asincronías en este proceso pueden derivar en un fracaso reproductivo.
Los estudios científicos sobre la seguridad de la maduración in vitro han demostrado que la salud neonatal y el resultado del desarrollo de los niños concebidos con esta técnica no son diferentes a los obtenidos en los niños nacidos a través de FIV tradicional. Sin embargo, el número relativamente pequeño de niños concebidos a través de Maduración in vitro de ovocitos en comparación con los concebidos mediante FIV invita a la precaución y demanda de estudios adicionales más extensos y con un mayor número de casos.